Debéis tener en cuenta que la temperatura en Laponia ronda entre los 10-15 grados bajo cero. Si viajáis en diciembre o enero, se mantienen estables durante todo el día. En febrero, los días se alargan y el sol puede calentar algo más el ambiente. A partir de ese mes, las diferencias empiezan a aumentar entre el día y la noche, llegando hasta los -25 grados. Así los consejos para Laponia pueden variar.
Lo mejor es vestirse con distintas capas. Para cubrir la primera capa de la piel, necesitaréis una camiseta térmica y ropa interior larga, la podréis encontrar en cualquier tienda de deporte. Lo más recomendable es que estas prendas sean de Coolmax, un tejido que evita que el sudor se seque y acabe enfriándose al adherirse al cuerpo.
La siguiente capa dependerá de la zona de Laponia a la que vayáis. Si visitáis Rovaniemi no os hará falta más que un pantalón gordo (vaquero o de pana), una camiseta polar y un jersey de lana. No obstante, si vais a algún rincón más frío como: como Saariselkä, Levi, Salla, Kuusamo o Pyhä es recomendable que vistáis con ropa de ski. Y, no olvidéis una chaqueta de forro polar y un paravientos y botas térmicas.
No os preocupéis si necesitáis algo más de abrigo para ciertas actividades porque las empresas que las organizan os darán la ropa térmica adecuada para cada práctica. Normalmente, las capas anteriores se complementan con: mono térmico, manoplas o guantes, gorro y calcetines de lana. Con estos consejos y confiando en Desnowtrips no os tendréis que preocupar más que por disfrutar.
Las bajas temperaturas nos obligan a preparar especialmente el viaje con ropa adecuada.
